La Otoplastia es la operación estética de las orejas que tiene como finalidad la corrección de las mismas cuando son excesivamente grandes o muy separadas y, también, corregir los lóbulos muy grandes o rasgados.
No se sabe la causa exacta de las orejas de soplillo, pero si existe un componente genético en su formación, ya que frecuentemente observamos el mismo patrón de orejas en uno o varios familiares directos del paciente.
Esta deformidad no favorece ni puede ser la causa de una alteración en la audición y la corrección estética de la forma externa de la oreja no va a influir en que oigamos mejor.
La operación de las orejas de soplillo es una elección estética que beneficiará la autoestima de las personas que se sometan a la cirugía. En el Instituto Pérez de la Romana tenemos experiencia contrastada en el desarrollo de este tipo de operación de orejas.
La otoplastia es de las pocas cirugías estéticas que es aceptada en niños (a partir de los 5 años), ya que estos pueden sufrir acoso psicológico al recibir burlas de otros niños, afectando el desarrollo de su personalidad y de sus relaciones sociales.
Tras la cirugía, los niños se sienten más seguros, mejorando su rendimiento escolar, su autoestima y fortaleciendo su personalidad.
Los adultos pueden ser operados a cualquier edad.
Esta intervención se puede realizar sin ingreso hospitalario, tanto con anestesia local o según tolerancia del paciente con una sedación superficial.
En ocasiones observamos orejas operadas en otros centros, que es fácil determinar que han sido intervenidas, pues no cumplen las proporciones estéticas de las orejas en el óvalo facial.
En el Instituto Pérez de la Romana conseguir un resultado natural y armónico es nuestra prioridad.
La intervención se realiza en régimen ambulante y podrá reanudar su vida normal al cabo de la semana.
Si tras llevar pendientes pesados durante años, presenta lóbulos rasgados o dilatados, o desea cerrar un agujero de un piercing que ya no desea, en el Instituto Pérez de la Romana realizamos técnicas sencillas y de rápida recuperación para solucionar esté problema.
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Es muy importante corregir las orejas de un niño en la edad preescolar, para evitar la posible aparición de complejos producidos por sus compañeros.
No, ni la deformidad de la oreja ni la cirugía correctora, tiene ninguna influencia sobre la audición.
No. Es una operación relativamente sencilla, aunque delicada y precisa. Mediante una incisión situada detrás de la oreja se realiza toda la intervención.
Como la intervención se realiza a través de una incisión situada detrás de las orejas, las cicatrices son imperceptibles.
El tipo de anestesia que utilizamos es anestesia local y sedación, con lo cual no duele en absoluto y la recuperación es más rápida y segura.
Después de la intervención se coloca un vendaje durante una semana y será en este momento cuando se podrá observar el resultado que normalmente es muy satisfactorio.
El postoperatorio no es doloroso, aunque debido a la inflamación y al vendaje se pueden presentar algunas molestias durante la primera semana, que con el tratamiento analgésico tienen que desaparecer.
El estado general se recupera el mismo día, ya que es una intervención ambulante, sin necesidad de ingreso, pero debido a que tendrá que llevar una cinta elástica, su vida laboral la podrá reiniciar al cabo de una o dos semanas.
El precio de la otoplastia es personal y depende del tratamiento que se realice en cada caso.
En el Instituto Pérez de la Romana les ofrecemos un plan de financiación con un trámite rápido y sencillo para comodidad de nuestras pacientes.
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