Existen algunas técnicas quirúrgicas orientadas específicamente a la pérdida de peso. Si bien es cierto que se suelen relacionar directamente con la estética, son más que eso. Una operación para adelgazar también reporta mejoras en la salud, la mente y la calidad de vida. Te mostramos algunas de estas ventajas con más detalle.
¿Cuáles son los beneficios de una operación para adelgazar?
Perder peso cuando se sufre obesidad siempre es beneficioso. Millones de personas pierden la vida todos los años por causas relacionadas directamente con el sobrepeso. Otras no se sienten a gusto con su cuerpo y tienen una baja autoestima. También hay quien nota cómo las actividades cotidianas son entorpecidas por este motivo.
Adelgazar no solo te ayuda a recuperar la figura, también favorece la salud física y emocional. La ciencia descubre cada poco tiempo nuevos problemas relacionados con la acumulación excesiva de grasa en el organismo. Por este motivo, es tan importante cuidarse y tomar medidas, entre ellas la de someterse a una operación para adelgazar. Esto permite evitar algunos problemas como:
- Arterioesclerosis. Esta enfermedad, también llamada cardiopatía coronaria, se produce por la acumulación de grasa y otras sustancias en las arterias. Uno de los efectos es que limita el flujo de la sangre que llega al corazón aumentando la presión arterial e incrementando el riesgo de sufrir un ataque cardíaco o una isquemia.
- Apnea obstructiva del sueño. Esta dolencia se produce porque se interfiere en los músculos que intervienen en la espiración y en la mecánica pulmonar. Durante el sueño, se obstruye parcial o totalmente la faringe y se detiene la respiración. Es habitual despertarse sobresaltado, pero en ocasiones puede ser más grave y producir asfixia.
- Diabetes. Es habitual que la obesidad desencadene diabetes del tipo dos. Cuando se sufre este tipo, el cuerpo no genera insulina o lo hace en una proporción incorrecta. Esta se encarga de metabolizar el azúcar para su provecho. Si el cuerpo no transforma los azúcares, resultan dañinos, afectando a las células y disminuyendo las capacidades cognitivas.
- EHGNA. La enfermedad del hígado graso no alcohólico o EHGNA es otro de los problemas derivados de la obesidad. El hígado se llena de grasa y no puede realizar su función depurativa.
- Reflujo gastroesofágico. El reflujo o ERGE causa quemaduras esofágicas y, con el tiempo, puede derivar en un cáncer de exófago.
- Artrosis. Con el sobrepeso las articulaciones sufren más. El tiempo y el esfuerzo las deforman y generan dolores en las rodillas, la cadera, los brazos, etc.
- Trastornos emocionales. Muchas personas con sobrepeso no están a gusto con su cuerpo, lo que les causa problemas de autoestima. Pero no solo eso, también puede obstaculizar el desempeño de algunas actividades, como puede ocurrir con algunos deportes.
¿Cómo funciona la cirugía para controlar la obesidad?
La cirugía para la obesidad, también llamada técnica sleeve, reduce el tamaño de estómago. Con esta intervención se consigue una rápida sensación de saciedad que impide comer más de la cuenta y, por tanto, se minimiza la ingesta de grasas.
También existe un tipo de cirugía para la obesidad mórbida llamada Bariátrica. Esta combina una técnica para la reducción del estómago y un by pass intestinal. La pérdida de peso en estos casos es muy notable, consiguiendo que los pacientes reduzcan hasta un 30 % de su peso corporal en poco tiempo.
Una vez se ha logrado la pérdida de peso, comienza una nueva vida para el paciente. Si, además de perder peso se elimina el exceso de tejido, no solo se logra rebajar el volumen y mejorar las funciones corporales, también se consigue una mayor satisfacción personal. Para ello se realizan dos técnicas; Bodylifting inferior y Bodylifting superior.
- Bodylifting inferior. Cirugía correctora para abdomen, espalda, glúteos y muslos.
- Bodylifting superior: Cirugía correctora para tórax, mamas y brazos.
A partir de ahí, es imprescindible cambiar los hábitos de vida. Es muy importante realizar un seguimiento médico, continuar cuidando la piel y mantener una buena actitud para no recaer en hábitos poco saludables.
En Instituto Pérez de la Romana disponemos de una unidad de obesidad. En ella podemos realizar cualquier tipo de operación para adelgazar de las que te hemos hablado. Por supuesto, estamos con nuestros pacientes también después de la intervención, haciendo un seguimiento y cualquier otra acción orientada a mejorar tu figura y que te sientas bien.